domingo, 2 de diciembre de 2018

Hola mamá

Ya llevas 4 años en el mundo del país de las nubes junto con papá, y he de confesarte qué me cuesta asimilar todavía qué no estés aquí, otra navidad sin ti, sin tu risa en el comedor, sin tu admiración extraña por Miguel Bosé, tu extraña y dulce forma de querernos, tu don para detectar a las personas...Tú ya no estás...no estás. Camino con el corazón a dos manos y dos resistencias de emergencia por si me derrumbo al pensarte, tus recuerdos están presentes en nuestras vidas, y aunque la vida siga a pasos de luchadora...A veces duele, pero no es vida sin dolor, no todo debe ser de rosas esparcidas por el suelo o risas constantes, aunque yo me río de ellas, la felicidad está, y sé qué está porque estás en mi corazón, en un hueco bastante importante para mí. Te escribo por aquí porque es algo parecido al cielo, pero internet es también el sunami del mundo, pero bueno, es lo qué hay. Después de marcharte me dejaste tu sonrisa en la memoria, después de irte te quedaste mis abrazos.
He escrito un libro con la esperanza de qué tu alma no se vaya de mi lado, he escrito un libro porque tú sabías qué me gustaba escribir y me animaste de una forma sigilosa a seguir en pie con mis metas. Pero te marchaste cuando la vida aun le quedaban ostias qué darme, te desvaneciste en el pueblo, en tu hogar, con la yaya, la tía Dory y el yayo...y tu mamá...y tu amor verdadero, papá.
Pero eh, no me voy a poner triste, tú no querías verme mal, hacias la risa en tu habitación y te disfrutaba, te escuchaba y pude quererte más...aunque no fui la hija correcta, más bien fui estúpida por no saber ser, ser sin ti, te quería conmigo todo el tiempo pero el tiempo supo robarte.
Llega el año 2019, aun falta varios días. pero me da igual, yo te escribo ahora, porque así tu dolor no lo es tanto, es más bien vida. Y tú mami, lo eres.
Gracias por parirme, por quererme todavía, por iluminarme y no dejarme caer en la tristeza, porque de ti aprendí a ser yo, pero siendo adulta, claro.
Esto no es una despedida eterna, esto es un te quiero en varias líneas de un texto, pero en un verso a cuatro o más pulsaciones por minuto.
Eres grande mamá, te quiero.
SIEMPRE A TU LADO Y YO SIEMPRE A TU LADO, TE LO ASEGURO.
ERAS Y ERES MI MEJOR MOMENTO DE LA VIDA.
Me siento bien cuando te escribo, porque siento qué tú jamás te has ido...

FELIZ AÑO PAPÁS ADELANTADO.

Hola mamá

Ya llevas 4 años en el mundo del país de las nubes junto con papá, y he de confesarte qué me cuesta asimilar todavía qué no estés aquí, otra...